El Traga
Llevaba tiempo pasando por este restaurante situado en la Alfalfa y por fin pudimos conocerlo. No es muy grande y tiene una decoración moderna y elegante. Llama la atención la cocina a la vista, me gusta mucho ver como hacen las preparaciones y como tratan el producto. Los platos están realizados con productos de calidad, son recetas de autor en las que destaca las técnicas más vanguardistas que aúnan tradición e innovación.
Una cosa que me gustó es que admiten reservas, ya que está muy de moda en Sevilla no admitir reservas y apuntar en lista y esperar cuando menos 20 minutos.
El trato al cliente es excelente, el camarero muy amable se presentó y nos hablo de cada plato que nos servía. Estuvo toda la comida atento a todo lo que necesitábamos.
Tenemos pendiente otra visita, ya que nos llamó mucho la atención un plato de la carta, «vaca madurada de 60 días», así que volveremos para probarla.
«Mini kebab de carrillada con salsa kimchi» (4.50€)
El kimchi es una preparación coreana cuyo ingrediente principal es la col china con un ligero sabor picante. Esta tapa nos encantó, está buenísima, tiene un sabor suave. Como curiosidad el papel que envuelve el kebab no es comestible, nos entró la duda e incluso le preguntamos al camarero, hoy en día no se sabe con tantas técnicas como hay.
«Atún rojo salvaje con tomate y pistachos» (9.50€)
Cuando hay buen producto no es necesaria mucha elaboración. Un plato de calidad con un sabor fresco.
«Turrón de foie con crema de albaricoque y brioche al vapor» (12.50€)
Exquisito, un plato 10, la textura buenísima, la combinación del albaricoque con el foie increíble, le aporta frescor y el brioche le da un toque dulce ligero.
«Croquetas de foie y manzana» (4.20€)
En realidad son dos unidades, pero el camarero sirvió cada una en nuestro plato individual porque no cabían más platos en la mesa. La croqueta tiene una textura cremosa, se nota el sabor a manzana pero el foie pasa mas desapercibido, aunque está muy bueno.
«Crema de membrillo y naranja con helado de queso viejo y helado de vainilla» (5€)
Es un postre con poco dulce en general. El helado de queso viejo es cremoso y tiene un sabor original poco visto. Sin embargo el de vainilla tenía una textura más bien de sorbete con mucho hielo. De crema había poca cantidad, y se notaba mucho un ingrediente peculiar que no sé cual era, pero que le restaba sabor al membrillo.
Y para terminar nos invitaron a un cóctel de la casa.
C/ Águilas, 6
Sevilla
